¿Es posible pedir a alguno de tus padres, incluso si tu apellido es diferente al de ellos?
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Esta es una de las preguntas menos frecuentes que he recibido, pero precisamente por ello consideré que era necesario responder.
En este artículo, buscaré esclarecer cualquier tipo de duda que puedas tener al respecto.
¿Para pedir a tus padres, es necesario demostrar que tienen el mismo apellido?
El tener una manera de demostrar que hay una relación con tus padres por medio del apellido, podría ser más favorecedor para el caso.
Sin embargo, si ese requisito no aplica para ti, no te preocupes.
Aún puedes tener un par de alternativas a la mano para llevar a cabo la petición sin mayores inconvenientes.
En primer lugar, debes asegurarte de poder demostrarle a las autoridades de inmigración que sí tienes un vínculo con tus padres, incluso si no comparten apellido.
Para eso, puedes solicitar un certificado de registro civil de nacimiento en el que figure el nombre de los tres, padres e hijo.
Este documento, normalmente, tendrías la alternativa conseguirlo de manera virtual en la respectiva página de la registraduría de tu país.
También asegúrate de traer contigo fotografías de momentos familiares, recibos de pago, acta de bautismo y otros documentos que puedan demostrar a las autoridades la relación.
No obstante, lo más probable es que te soliciten una prueba de ADN que confirme la relación biológica entre ambos.
Si el peticionario tiene planeado tomar la prueba en los Estados Unidos, sugiero que se contacte con el laboratorio y se asegure de que éste sea acreditado por AABB en el país.
El resultado se le compartirá al Servicio de Inmigración y Ciudadanía de los Estados Unidos (USCIS, en inglés), del mismo modo que los otros documentos solicitados.
Estos deberían complementar los papeles que, además, se requieren para la sola petición.
¿Qué otros requerimientos debes tener presente para realizar la solicitud?
En primer lugar, se cuidadoso en los detalles. Las autoridades migratorias son muy minuciosas en los requisitos que solicitan, así que es preferible que trates de llevar todo al pie de la letra, de entrada.
No olvides que, para hacer una petición a alguno de tus padres, debes ser ciudadano estadounidense.
Además, sólo puedes llevar a cabo la solicitud si eres mayor de 21 años.
A parte de esos elementos yo sugiero que también busques la asesoría de un abogado de inmigración, que pueda estudiar mejor tu caso y darte una opinión más próxima a lo que tú necesitas.
Cada caso es diferente, y por eso es preciso que sean estudiados con el mayor detenimiento posible.
¿Conoces a alguien que pueda servirle esta información? Compártela, te lo agradecerán.
Contáctame aquí o al (509) 255-3431 y déjame conocer tu caso. Trabajemos juntos para que puedas alcanzar tus metas.